Washington estudiaría protección contra el calor para trabajadores de espacios interiores
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El Departamento de Trabajo de EE. UU. propuso normas federales para proteger a los trabajadores de los riesgos del calor en espacios interiores y exteriores. Washington y Oregón ya cuentan con normas de este tipo para quienes laboran en entornos al aire libre.
La Administración de Seguridad y Salud en el Trabajo (OSHA, por sus siglas en inglés), presentó la propuesta de la Normativa para la Prevención de Lesiones y Enfermedades Causadas por el Calor en Entornos de Trabajo al Aire Libre y en Interiores.
La norma exigiría a las empresas que elaboren planes para evaluar y controlar los riesgos que pueda generar el calor en el lugar de trabajo.
La propuesta incluye la identificación de esos riesgos y la aplicación de medidas de control cuando los niveles de calor sean extremos en los sitios de trabajo. También, exigiría disponer de un plan de respuesta de emergencia, entrenar a los empleados y supervisores en estos temas y conservar registros de esas actividades.
Según la OSHA, “la norma propuesta se aplicaría a todos los empleadores que realicen trabajos al aire libre y en interiores en todos los sectores de la industria en general, la construcción, el sector marítimo y la agricultura en los que la OSHA tenga jurisdicción”.
La OSHA señaló que el principal objetivo “es prevenir y reducir el número de lesiones, enfermedades y muertes laborales causadas por la exposición a niveles peligrosos de calor”.
NWPB se puso en contacto con Ryan Allen, del Departamento de Trabajo e Industrias del Estado de Washington.
Allen dijo que algunos de los requisitos que regirán para los empleadores en esta propuesta federal incluyen la evaluación del riesgo de calor, proporcionar hidratación y ser capaz de responder si un trabajador tiene síntomas de una enfermedad relacionada con la exposición al calor extremo.
Asimismo, mencionó que estos requisitos ya están cubiertos en las normas de protección contra el calor de Washington para los trabajadores al aire libre.
“La mayor diferencia en este momento con las normas federales propuestas son sus disposiciones sobre el calor en interiores”, aseguró.
Allen afirmó que Washington se ha centrado en las normas de calor para los trabajadores al aire libre en lugar de aquellas para trabajadores de espacios interiores, porque las primeras se han solicitado más.
“No recuerdo haber visto nunca una petición sobre [protección del] calor en interiores. Cuando actualizamos nuestras normas de calor en exteriores, reconocimos la necesidad de [reglas de] calor en interiores, pero también reconocimos que se trata de un estándar diferente”, manifestó Allen.
Allen explicó que cuando se aprueban las normas federales, Washington L&I se adapta para cumplir con los requisitos federales y trabajaría en las normas para espacios interiores donde el calor representa un peligro para los trabajadores.
“Vamos a centrarnos en esas industrias, que trabajan en sectores en los que el calor se produce en el interior, empeorando la situación en zonas en las que quizá no haya tanto control climático para afrontar el problema”, mencionó Allen.
Washington, Oregón, California, Colorado y Minnesota cuentan con algún tipo de protección contra el calor para sus trabajadores.
Según el informe de L&I Safety and Health Assessment and Research for Prevention, Washington aceptó 53 reclamaciones por enfermedades relacionadas con el calor en 2022. También, menciona que los trabajadores agrícolas y los obreros son los que presentan más reclamaciones. La mayoría de ellas proceden de los condados de Yakima, Spokane, King y Grant.
La Red de Seguimiento de Washington (WTN, por sus siglas en inglés), una base de datos de salud pública medioambiental, realiza un monitoreo de los casos de estrés térmico en el estado. Un informe de WTN mostró que hubo 214 muertes por estrés térmico en Washington entre 2018 y 2022.
La base de datos también mostró que al menos 612 personas fueron hospitalizadas por diferentes condiciones asociadas con el estrés por calor, como insolación o agotamiento, entre 2017 y 2021.
Los casos de muertes y enfermedades relacionadas con el calor han aumentado considerablemente en la última década.
La Red de Seguimiento de Washington no especifica cuántos de esos incidentes estuvieron relacionados con el trabajo.
