Cultura del mariachi profundiza sus raíces en Washington Central
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¿Ha escuchado alguna vez “El son de la negra”?
Probablemente haya escuchado esta canción durante eventos relacionados con la herencia hispana y latina.
En el centro y sureste de Washington, la cultura del mariachi revela una fuerza especial con raíces profundas desde hace décadas.
Jason Dormady es profesor de Historia en la Universidad Central de Washington.
“Muchos de los tejanos que llegaron a principios del siglo XX trajeron consigo una cultura musical muy fuerte. Pero también los emigrantes braceros y post-braceros que llegaron más tarde trajeron consigo una cultura musical”, explicó Dormady.
Durante años, solistas, conjuntos profesionales, festivales, universidades e incluso escuelas secundarias han mantenido viva esta herencia cultural, transmitiéndola de generación en generación.
Aaron Camarena (izquierda) y Eduardo Cortés se preparan entre bastidores para acompañar a la artista de mariachi Lupita Infante en la Feria del condado de Grant en agosto de 2023. Cortés y Camarena dirigen el programa Mariachi Huenachi de la Escuela Secundaria de Wenatchee. (Crédito: Annie Warren / NWPB).
Christina Torres García es la directora del programa de Estudios Latinos y Latinoamericanos de la Universidad Central de Washington.
Torres dice que, esté donde esté, el mariachi es un símbolo de pertenencia universal.
“Iba a una conferencia y en la esquina de una calle empiezo a oír mariachi y pienso: ‘Espera, estoy en París. ¿Qué?’. Me pareció la forma más hermosa de celebrar la diversidad. Realmente me hizo sentir que estaba conectado de alguna manera”, dijo Torres.
Dormady afirma que el mariachi también une a las comunidades.
“La actuación del mariachi es una forma estupenda de recordar el hogar, de conservar canciones que le recuerdan a la gente quiénes son, y a las familias sus conexiones”, mencionó Dormady.
El Mariachi Northwest Festival de Wenatchee es el principal acontecimiento mariachi de Washington. Comenzó a finales de los 90 con el director de mariachis Mark Fogelquis, un etnomusicólogo de Los Ángeles.
Eduardo Cortés-Solorio es el actual presidente del Mariachi Northwest Festival.
“El festival de mariachi es un taller de tres días, donde los estudiantes aprenden de mariachis profesionales. Los estudiantes pueden participar en una exhibición en la que muestran la música que han aprendido de estos instructores en esos tres días. También ofrecemos talleres de folclore”, explicó Cortés-Solorio.
El festival también organiza una gran gala.
“Dependiendo del año, tenemos un artista principal. El año pasado actuó Shaila Durcal”, dijo Cortés-Solorio. “En el pasado hemos tenido a Ana Bárbara, Beatriz Adriana. A veces tenemos sólo un mariachi específico: Mariachi Sol de México, Mariachi Los Camperos”, añadió.
El Mariachi Huenachi de la Escuela Secundaria de Wenatchee, uno de los mejores mariachis de escuelas del país, abre la gala cada año. El grupo también fue fundado por Fogelquist.
El Mariachi Huenachi obtuvo el segundo puesto en la categoría de escuelas secundarias durante el concurso del Mariachi Spectacular de Albuquerque, el pasado mes de julio.
Torres afirma que la música de mariachi ha llegado hasta los rincones más pequeños del mundo.
“Ha tenido bastante éxito para crear esa identidad de ser latino, sobre todo en Estados Unidos, ¿no? Cuando alguien oye mariachi, lo arrastra a ello. Y es un sentimiento de orgullo”, dijo Torres.
